Sol. Reflexiones fuera de la plaza
Por primera vez en una semana no voy a pisar la Puerta del Sol. Necesito un día para reponer fuerzas. Pero no dejo de pensar en este fenómeno que ha surgido de manera interesantísima.
Origen
El origen inmediato de esta movilización está como todos sabemos en las manifestaciones de “Democracia Real Ya”. Las características de estas movilizaciones es que surgen de grupos de ciudadanos con poca o nula experiencia militante que sin embargo – y como es lógico en la situación que vivimos – necesitan exteriorizar su hartazgo.
El origen mediato lo podemos observar en manifestaciones de tipo similar bien nutridas de la comunicación por Internet, como “Juventud sin futuro”.
Es evidente que no son las primeras luchas que ha habido en Madrid, pero por una serie de acontecimientos estas han podido encauzar el descontento y aunar voces, cosa que no se había realizado anteriormente. En este sentido, los que somos o hemos sido parte activa de otras movilizaciones debemos hacer autocrítica, porque los movimientos no van a detenerse fácilmente y es conveniente extraer todo tipo de lecciones al respecto.
Causas
Las causas son muy fáciles de identificar. Cientos de imputados en las listas electorales. Casos de corrupción notables que afectan a los dos principales partidos políticos (Gürtel / EREs). Cinco millones de parados. Rescate financiero con el dinero de todos (socialización de las pérdidas, privatización de los beneficios). Gobierno del Estado en modo kamikaze activo. Reforma Laboral (Jubilación a los 67. Gobierno real de los banqueros y empresarios (reunión con el grupo de los 37 empresarios más importantes por parte del presidente del gobierno). Blindaje político por parte de los siempre (Ley Electoral, Sistema D’Hondt). Recortes sociales por todas partes. Generación muy preparada y desperdiciada socialmente.
Perfiles
Si bien la Acampada está protagonizada principalmente por jóvenes, podemos decir que hay gente de todas las edades y condiciones. Estudiantes que no encuentran futuro. Trabajadores jóvenes en estado de permanente precariedad (salarios que no llegan a mileuristas). Trabajadores menos jóvenes sufriendo en carne viva los EREs y recortes. Parados de corta y larga duración. Pensionistas. De todo.
Tratamiento mediático
Interesantísima ha sido esta cuestión. El procedimiento de la mayoría de los medios, en una semana, ha sido el siguiente:
De Antisistemas A No son tan malos A ¿Por qué no hay líder? A Simpatía paternalista A Ignorancia (hoy)
El Diario El Mundo ha sido el que ha sostenido la principal línea criminalizadora en un sentido editorial. Si bien ha habido artículos fieles a la realidad, lo que han querido resaltar por medio de sus portadas y titulares (de lo que debemos responsabilizar directamente al director del medio, Pedro J. Ramírez) ha sido lo malvada que es esta gente. Primero decían que eran antisistema. Se mantuvieron en sus trece. Luego que no eran demócratas. Ahora dicen que antes no eran antisistema ni extremistas pero que empiezan a estar dominados por la extrema izquierda (lo dicen en un artículo en la edición escrita, no lo encuentro online ahora mismo, pero es del día de hoy, Lunes 23). Además el único que ha alentado un desalojo por todos los medios (lo que incluye la violencia) a toda costa, de manera totalmente irresponsable, ha sido Pedro J. Ramírez, al que parece que no le causaría ningún tipo de problema moral el hecho de que alguien falleciese por aplastamiento tras una carga policial en un lugar lleno hasta la bandera. El Mundo sigue erre que erre intentando causar crispación y división, inventándose escisiones y demás (Democracia Real Ya ha dicho que las Asambleas son autónomas y que lo que proponen no es necesariamente lo mismo que ellos, ya que ellos ya tienen una tabla reivindicativa previa, cuestión que para El Mundo es motivo de división)
El País ha pasado de la criminalización al buenrrollismo siguiendo el esquema mayoritario anteriormente mencionado, seguramente siguiendo las instrucciones de alguien del PSOE (quien sabe). Público ha intentado desarrollar reportajes más fieles.
Los medios de la ultraderecha (La Razón, Intereconomía, esRadio) han dado pie a todo tipo de teorías y agresividad. De hecho El Mundo se queda corto, ya que los de Pedro J. han atacado desde la opinión y estos desde la manipulación y la invención. La entrevista falsa de Intereconomía pasará a la historia. César Vidal y Jiménez-Losantos han ganado el premio de las teorías conspirativas. Tardaba en salir ETA y han sido ellos los que se han dedicado a buscar relaciones. César Vidal hablaba de entrenamiento por parte de Segi en kale borroka (imaginémonos 10.000 madrileños entrenados por Segi en kale borroka, en lugar de estar en Sol en plan pacífico se podría tomar la ciudad directamente). Losantos hablaba de vagabundos, franciscanos y etarras. No se si esto es punible.
En los medios contrainformativos, Diagonal ha prestado gran atención, Kaos ha ido dado las noticias y LaHaine ha comentado muchas cosas como eran pero también ha dado pie a las teorías conspirativas de las vanguardias izquierdistas varias.
Sabemos ya que los medios de comunicación son grandes empresas con intereses y por tanto en general la manipulación está a la orden del día, no es nada nuevo.
Un fenómeno interesante ha sido descubrir la barrera mental de los periodistas, incapaces de comprender los métodos asamblearios. Si un tipo registró el dominio, ya se busca su pasado para ver si es de tal o cuál partido (cuando seguramente será el pobre hombre que se ofreció en asamblea a registrar el dominio porque nadie sabía). Si un tipo hablaba y resultaba ser abogado estudiante de oposiciones, decían que el líder era un abogado burgués (tertulianos de RNE). Tampoco entendían la diferencia entre los debates internos y las propuestas externas. Están acostumbrados a hablar con partidos políticos en los que el cargo de turno ordena y manda y lo que dice va a misa. No están acostumbrados a la existencia de debates y propuestas variadas. Así, si algún loco propone que todos los días de la semana pasen a denominarse Sábado y pasa por ahí un periodista, este dirá “La Asamblea de Sol ha decidido que todos los días deberán llamarse sábado”. Esto provoca que los tertulianos comiencen a hablar de lo absurdo de las propuestas, de que los acampados están mal de la cabeza…
Los medios siguen descolocados ante este fenómeno y no saben como reaccionar. Pensaban relacionarlo con las elecciones por no se enteran de que el descontento es independiente de cualquier sondeo, resultado o escaño.
Reacciones políticas
Un aspecto positivo ha sido sin lugar a dudas el jaque a la clase política en general. Los políticos se han convertido en una clase parasitaria de la sociedad. Los partidos políticos son empresas de marketing coaligadas con los banqueros. En líneas generales no existe vocación de servicio o idealismo, lo que hay es mucha ambición.
Esta gente no se ha enterado de que iba la historia en ningún momento.
En el PSOE lo vieron como una molestia desde el principio. Con nula habilidad desalojaron la plaza pensando que se quitaban el problema. Lo que hicieron fue multiplicarlo por diez. Después de esto comenzaron a hacer el arrastramiento más lamentable que se ha podido ver nunca, llorando por las esquinas solicitando amistad. El descrédito de este partido es por todos conocido.
En el PP han pasado por todos los estadios posibles, en distintas realidades espaciotemporales. Unos han pasado de la crítica a la mano tendida. Otros de la mano tendida a la crítica. Otros de la comprensión pretendida a la incomprensión y vuelta a empezar y otros todo a la vez. Han querido utilizarlo como arma electoral porque si una cosa sabemos es que PPSOE está alejado de la realidad y está centrado únicamente en su lucha bicéfala, sin enterarse de las cosas que pasan en la vida. Por esto, insistían con sus mensajes para tontos (“si no os gusta al PSOE, tenéis que votar al PP”), con su visión en blanco y negro de la vida. Ahora tras las elecciones, por no se sabe qué motivo parece ser que se consideran ganadores frente a la Acampada, olvidando que la Acampada trasciende el circo electoral.
PPSOE tiene el monopolio de la política y no tolera que nadie más haga política.
IU ha ido a la zaga como es habitual. Ángel Pérez comenzó criticando la historia. Después, como puede tener cierta lógica, apoyaron las movilizaciones. Un problema de IU en general es el de complejo en el discurso, el de darse excusas, el de “no si yo soy bueno, si no apoyo esto”. Mi teoría es que viendo el tratamiento mediático pensaron que no iban a ser criminalizados por apoyar la historia. Hablo de determinados cargos porque me consta que ha habido afiliados participando a título individual desde el principio.
UPyD ha sabido mantener cierta distancia elogiando las cosas que le benefician como la petición de reforma de la Ley Electoral.
En las organizaciones de izquierda combativa ha habido distintas posturas. Por un lado ha habido muchos militantes participando activamente en comisiones, como cualquier otro ciudadano que puede hacerlo. Por otra parte ha habido varias organizaciones ortodoxas críticas con los pequeño-burgueses y sus demás demonios habituales.
Los indiferentes y los quejones
Si una cosa me ha llamado más la atención han sido los indiferentes y los quejones. La crisis está a la orden del día en nuestras conversaciones cotidianas, cada vez que hablamos con unos o con otros siempre sale la coletilla “ya sabes, con la crisis”, “es que está todo muy mal”, “es que con esta situación”… Cosa evidente visto lo visto.
Sin embargo, parece que la crisis se ha esfumado de repente para este tipo de personas. De repente, no hay motivos. De repente, sobra el trabajo. “De qué se quejan, que se pongan a trabajar”, “ninis que viven de su padres”, “les mandaba yo a la obra”, “que estudien más”, “que se emancipen”, “que emprendan algo”. Lo dicho, de repente los bancos dan créditos para emprender, los jóvenes son todos vagos, no hay crisis ni desempleo, España es maravillosa.
Resumen: En esta península el deporte nacional es la queja y la envidia. Es un país que tiene demasiados componentes asquerosos. De gente que se queja por quejarse y que habla con una facilidad asombrosa acerca de todo. Si alguien hace algo, se le critica. Si alguien intenta prosperar, se le intenta hundir. Las personas que decían “que alguien haga algo” se quejan porque alguien hace algo.
Como afectado directamente por la crisis, con estudios, con trabajo, con carrera, con idiomas, con emprendimiento propio en ciernes (sin créditos: los bancos no dan crédito aunque se les ha dado dinero de todos precisamente para eso, pero han preferido repartirlo para pensiones vitalicias), emancipado me siento insultado gratuitamente por esta gente, que para colmo es gente también afectada por esta crisis, que de repente ante un atisbo de movilización social decide que la crisis ya no existe, que no hay motivos y que me llama perroflauta, vago, adicto al porro y a la delincuencia y no se sabe cuantas lindezas más. Contamos entre nuestros vecinos con demasiados gusanos asquerosos. Paciencia y adelante.
El salario neto que entra en mi casa cada mes, sumando las dos partes, es de 1.900 €. La media es de 950, ni mileuristas, y gracias a que cobro más desde hace un mes. El número de contratos fijos en mi casa es 1, por lo que contamos a 0’5 contratos fijos por persona. El número de personas que cotizan a la seguridad social en mi casa es de 1, por lo que contamos a 0’5 personas que cotizan en mi casa. Y así multiplicado por miles. O acampo en Sol o me dedico a quemar sucursales bancarias, de momento toca lo primero, quejones de las narices.
Todavía tengo que dar gracias (a los quejones, además) por no ser un desempleado comiendo heces tras un terremoto en Haití, desnutrido y moribundo. Porque ya se sabe, los quejones no quieren que nadie esté bien, lo que quieren es que todo el mundo esté mal, y mientras no estés todo lo fatal que puedas estar, o como poco tan mal como ellos, no puedes decir nada.
Estos son los mismos que miraban para otro lado cuando tiraban a la gente en avionetas al mar en Argentina. “Algo habrán hecho”, “¿de qué se quejan?”, “Todo va de maravilla”, “No entiendo a esta juventud, lo tiene TODO”. Es la misma catadura moral.
El funcionamiento
El funcionamiento de la Acampada de Sol es fácil de describir: hay una serie de comisiones y grupos de trabajo con un funcionamiento totalmente abierto y asambleario, y por otro lado hay una Asamblea General en la que se toman las decisiones.
Lo positivo de todo esto es que es participativo y gente que nunca ha estado involucrada en nada se ve con la oportunidad de manifestar abiertamente sus opiniones. Además es precioso recuperar el concepto de “plaza del pueblo” como lugar en el que hablamos con nuestros vecinos sobre todo tipo de temas, desde una dinámica de respeto mutuo y libertad de opinión.
Lo negativo del funcionamiento es que es muchas veces demasiado lento. Que al ser totalmente abierto es posible que una persona se pase por ahí, diga su primera movida mental, la defienda vehementemente, de la brasa y luego no vuelva a aparecer.
En general hace tiempo que no defiendo el asamblearismo y la horizontalidad porque es bastante fácil de manipular, pero aun así de momento el funcionamiento está siendo positivo, si bien no perfecto.
La convivencia
Este es el aspecto más digno de mencionarse. Hay comisiones de Infraestructura, Alimentación y Limpieza que hacen que la vida en la Puerta del Sol fluya sin incidentes y con un altísimo nivel participativo.
Se hace especial hincapié en evitar el botellón y se consigue en alto grado, por lo que directamente podemos calificar como mentira todas las informaciones de desprestigio general que van fluyendo y que quieren intoxicar hablando de un escenario apocalíptico de porreros y drogadictos.
El momento actual y las necesidades.
La Acampada de la Puerta del Sol ha planteado un desafío importantísimo ante las autoridades, un toque de atención durísimo secundado por un amplio sector de la población. Los medios intentan reducir todo a cifras, diciendo “son sólo 20.000” (o ya directamente “son sólo 1.000”). Olvidan que el flujo de gente es constante, que hay gente permanentemente y gente que pasa sólo un rato, gente que va algún día y gente que va todos los días. En el horario de máximo apogeo hay 25.000, pero durante el día hay 2.000, 3.000, 5.000, dependiendo del momento. ¿Cuánta gente habrá pasado por ahí en total? Seguro que más de 100.000. A los que sumamos gente de otras muchas ciudades, pues esto ha tenido una gran repercusión.
El desafío está planteado y los motivos de protesta abundan. Directamente, el que crea que no existen motivos de protesta es que carece de las nociones más elementales de entendimiento que puede tener un individuo. Esto es ya histórico, pero debe continuar.
Aguantar en el tiempo no va a ser fácil si no se concreta. Podemos decir que hay una serie de “ideas-fuerza” como son la reforma de la ley electoral, el hartazgo respecto a la corrupción política y la inadmisión de las ayudas públicas a los grandes banqueros. Estas ideas-fuerza deben ahora concretarse. Que existan y no sean concretas es positivo. Es vergonzoso que los medios reprochen esto, cuando todavía no sabemos a ciencia cierta que proponen el PP o el PSOE, pues sólo escuchamos insultos y barbaridades perpetuamente.
Se ha hablado más de política que nunca gracias a esta Acampada, porque la campaña electoral sólo interesaba a los hooligans. Y la gente ha participado y ha reflexionado más que nunca. Todo puntos ya de por sí positivos, todo logros, es una semilla.
El deseo de permanencia de una semana más es un tanto a favor que vuelve a descolocar a todos. Los que lo identificaban exclusivamente con las elecciones y veían maniobras para “influir” se acaban de chocar con la realidad totalmente y no saben como interpretarlo, por eso desean ignorarlo. Como siempre, los quejones se quejan. Primero decían que tenían que desmontar la Acampada. Como no lo hicieron, dijeron que si no seguían tras las elecciones es que todo era una pantomima. Como siguen, dicen que lo tenían que haber quitado tras las elecciones. La locura mediática, el show continúa. Habrá hooligans partidistas, pero crece el descontento.
El problema de este deseo de permanencia es que es muy complicado mantener la resistencia. Personalmente, para mí es difícil llevar este ritmo e imagino que lo será para todos, ya que es extenuante a más no poder. Los que pasan allí todo el día porque pasan allí todo el día y los que tenemos el ritmo trabajo-Sol-trabajo-Sol por lo mismo. Por eso es necesario dotar a esta historia de perspectivas.
Mantener la Acampada es positivo pero esto ha de fluir y sobretodo hay que conseguir gente que verdaderamente pueda pasar tiempo allí. En este sentido sería positivo conectar con luchas existentes, asociaciones variadas, desempleados, en fin, con todos los sectores en lucha. Si estuvo el campamento de Sintel tanto tiempo, la experiencia puede repetirse pero hace falta gente que no sólo “se pase” sino que “esté”.
Es positiva sin duda la voluntad de extenderlo a barrios y convocar asambleas en las plazas de Madrid para el sábado próximo a las 12h (recordad, en La Guindalera es en Plaza de S. Cayetano) porque puede ser el germen de algo.
Y sería importante sobretodo concretar una serie de propuestas, algo que ya es más de lo que hacen los partidos del sistema, pero que sería interesante. Se que se están debatiendo y hay confusión sobre esto porque por un lado los medios se inventan cosas que nunca se han debatido y por otro lado porque no se acaba de regular bien esto. Creo que sería positivo que la gente tenga cosas concretas a las que agarrarse.
Mi apuesta personal es que se avance hacia propuestas de mínimos y de amplio consenso social. Se que se está debatiendo hasta el sexo de los ángeles en las comisiones, pero creo que lo positivo sería establecer un decálogo que pueda contar con un amplio apoyo, entendiendo esto como un tema de mínimos.
Entiendo que hay personas, entre las que me incluyo, que aspiran a cotas más altas, pero hemos de ver esto como la posibilidad de obtener avances. Unos se quedarán en la siguiente estación y otros seguiremos el viaje, pero hagamos por llegar a la siguiente estación. Algunos vamos “pasados de revoluciones” (nunca mejor dicho) y temo que esto pueda suponer la introducción de propuestas que todos sabemos o debemos saber que no tienen consenso social.
Para mí, las propuestas han de centrarse en las ideas-fuerza de consenso social que se han mencionado, que sin duda no suponen la revolución obrera pero que cualquiera puede entender. Si de mí dependiese:
- Reforma de la LOREG en la que se incluya :
- La circunscripción única (esto sólo perjudicaría al PP y al PSOE, los partidos nacionalistas quedarían igual y los partidos más pequeños de nivel estatal crecerían) sin porcentaje mínimo y con reparto proporcional de escaños.
- Listas abiertas
- Condenados por corrupción, inhabilitados por X años (¿20?) sin posibilidad de ostentar cargo alguno ni figurar en listas electorales
- Blindaje frente al chantaje de los banqueros. Reformar la Constitución e incluir la prohibición de realizar rescates financieros a la banca privada.
- Derogar la reforma laboral de Zapatero. (volver a la jubilacióna los 65, despido de 45 días por año trabajado, etc)
- Eliminación de los privilegios de la clase política (terminar con absentismo, inmunidad, falta de transparencia…)
- Dación en pago de las viviendas para cancelar las hipotecas
- Reestablecer el subsidio de desempleo
- Que los culpables principales de la crisis paguen por lo que han hecho: subida de impuestos a los bancos
- Tipificar como delito desarrollar negocios privados que provoquen la crisis (esto va por los bancos, que anuncian el chocolate del loro y luego nos arruinan a todos)
- Referéndums obligatorios y vinculantes para las cuestiones de gran calado que modifican las condiciones de vida de los ciudadanos (guerras, reformas laborales, etc, NO PARA TODO )
- Independencia del Poder Judicial: reforma de la figura del Ministerio Fiscal para garantizar su independencia, no al nombramiento de miembros del Tribunal Constitucional y del Consejo General del Poder Judicial por parte del Poder Ejecutivo.
A mí se me ocurre este decálogo de cosas que ya han sobrevolado el ambiente y que podrían generar un consenso social muy amplio, que nunca será total.
Igualmente, podría ser positivo un aumento cualitativo de las acciones simbólicas a realizar, hay muchas que se me ocurren que podrían estar fenomenal.
En cualquier caso, a seguir yendo a Sol siempre que se pueda, a colaborar en todo lo que se pueda. Que no te lo cuenten, ve a verlo con tus ojos, con los prejuicios en casa.
Cerramos las tragaderas, abrimos la esperanza